La crónica, por Manolo M.
0 de enero, día de San Sebastián, 8:30 horas y unos 7º de temperatura; al llegar al lugar de reunión habitual en Avda. Navarra, somos muy pocos bikers los que hemos acudido a la cita, tan sólo siete y, curiosamente, tres de ellos mujeres, y es que como bien dijo Bob Dylan: “The times they are a-changin”
Afortunadamente, y a pesar de lo escaso del grupo, la totalidad de la oficialidad no se ausentó y el teniente, Mariano, sí que se encontraba entre la concurrencia. Así pues, el propio teniente propuso trasladarnos a la zona de Andatza para realizar una etapa de corto recorrido y en la que se primase esencialmente el pisteo y el recorrido por senderos y zonas técnicamente menos complicadas.
Nos dirigimos callejeando hacia Ibaeta y, en Nanogune, se nos une Borja (ya somos ocho), posteriormente la subida a la “ranita”, la bajada a Usurbil y de allí, por el recorrido habitual por Santu Enea y Okupas, en ascenso en todo momento, ciclamos por la pista habitual hasta llegar a la entrada al recinto en el que se encuentra la antena de Andatza..
A partir de ahí, el teniente se hizo a un lado y fue Borja quien principalmente se encargó de dirigir la expedición y, conduciéndonos mayoritariamente en descenso, por senderos principalmente, nos encaminó en dirección a la incineradora.
En toda esa serie de senderos encadenados, algunas zonas estaban seriamente afectadas por talas realizadas recientemente, y si a todo ello le unimos algo de lluvia y la abundancia de barro, todo ello motivó que fuera preciso afinar el pilotaje y que incluso se produjeran algunas caídas, afortunadamente sin mayores consecuencias.
Al finalizar el descenso, llegada a Lasarte, unos 11º de temperatura, tres de nosotros nos quedamos a limpiar las bicis aprovechando que, tras larga inactividad, la estación limpiabicis de Lasarte ya funcionaba; los otros cinco bikers restantes, al Teresatxo, a celebrar el cumple de Mariano.
Finalmente, con la bici impoluta a pesar del mucho barro de Andatza; en casa a las 13:30 y, como casi siempre, feliz de haber tenido menos lluvia de la prevista, haber sido capaz de obviar pereza y mal tiempo, y más que feliz de haber disfrutado del recorrido, del buen ambiente y de la grata compañía de los amigos/as Txalupas.
Afortunadamente, y a pesar de lo escaso del grupo, la totalidad de la oficialidad no se ausentó y el teniente, Mariano, sí que se encontraba entre la concurrencia. Así pues, el propio teniente propuso trasladarnos a la zona de Andatza para realizar una etapa de corto recorrido y en la que se primase esencialmente el pisteo y el recorrido por senderos y zonas técnicamente menos complicadas.
Nos dirigimos callejeando hacia Ibaeta y, en Nanogune, se nos une Borja (ya somos ocho), posteriormente la subida a la “ranita”, la bajada a Usurbil y de allí, por el recorrido habitual por Santu Enea y Okupas, en ascenso en todo momento, ciclamos por la pista habitual hasta llegar a la entrada al recinto en el que se encuentra la antena de Andatza..
A partir de ahí, el teniente se hizo a un lado y fue Borja quien principalmente se encargó de dirigir la expedición y, conduciéndonos mayoritariamente en descenso, por senderos principalmente, nos encaminó en dirección a la incineradora.
En toda esa serie de senderos encadenados, algunas zonas estaban seriamente afectadas por talas realizadas recientemente, y si a todo ello le unimos algo de lluvia y la abundancia de barro, todo ello motivó que fuera preciso afinar el pilotaje y que incluso se produjeran algunas caídas, afortunadamente sin mayores consecuencias.
Al finalizar el descenso, llegada a Lasarte, unos 11º de temperatura, tres de nosotros nos quedamos a limpiar las bicis aprovechando que, tras larga inactividad, la estación limpiabicis de Lasarte ya funcionaba; los otros cinco bikers restantes, al Teresatxo, a celebrar el cumple de Mariano.
Finalmente, con la bici impoluta a pesar del mucho barro de Andatza; en casa a las 13:30 y, como casi siempre, feliz de haber tenido menos lluvia de la prevista, haber sido capaz de obviar pereza y mal tiempo, y más que feliz de haber disfrutado del recorrido, del buen ambiente y de la grata compañía de los amigos/as Txalupas.
2 comentarios:
20 de enero, día de San Sebastián, 8:30 horas y unos 7º de temperatura; al llegar al lugar de reunión habitual en Avda. Navarra, somos muy pocos bikers los que hemos acudido a la cita, tan sólo siete y, curiosamente, tres de ellos mujeres, y es que como bien dijo Bob Dylan: “The times they are a-changin”
Afortunadamente, y a pesar de lo escaso del grupo, la totalidad de la oficialidad no se ausentó y el teniente, Mariano, sí que se encontraba entre la concurrencia. Así pues, el propio teniente propuso trasladarnos a la zona de Andatza para realizar una etapa de corto recorrido y en la que se primase esencialmente el pisteo y el recorrido por senderos y zonas técnicamente menos complicadas.
Nos dirigimos callejeando hacia Ibaeta y, en Nanogune, se nos une Borja (ya somos ocho), posteriormente la subida a la “ranita”, la bajada a Usurbil y de allí, por el recorrido habitual por Santu Enea y Okupas, en ascenso en todo momento, ciclamos por la pista habitual hasta llegar a la entrada al recinto en el que se encuentra la antena de Andatza..
A partir de ahí, el teniente se hizo a un lado y fue Borja quien principalmente se encargó de dirigir la expedición y, conduciéndonos mayoritariamente en descenso, por senderos principalmente, nos encaminó en dirección a la incineradora.
En toda esa serie de senderos encadenados, algunas zonas estaban seriamente afectadas por talas realizadas recientemente, y si a todo ello le unimos algo de lluvia y la abundancia de barro, todo ello motivó que fuera preciso afinar el pilotaje y que incluso se produjeran algunas caídas, afortunadamente sin mayores consecuencias.
Al finalizar el descenso, llegada a Lasarte, unos 11º de temperatura, tres de nosotros nos quedamos a limpiar las bicis aprovechando que, tras larga inactividad, la estación limpiabicis de Lasarte ya funcionaba; los otros cinco bikers restantes, al Teresatxo, a celebrar el cumple de Mariano.
Finalmente, con la bici impoluta a pesar del mucho barro de Andatza; en casa a las 13:30 y, como casi siempre, feliz de haber tenido menos lluvia de la prevista, haber sido capaz de obviar pereza y mal tiempo, y más que feliz de haber disfrutado del recorrido, del buen ambiente y de la grata compañía de los amigos/as Txalupas.
Nencini un comentaro de ruta de nivel escepcional BRAVO BRAVISIMO.
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