El precio a pagar
Un ciclista en su lecho de muerte le pide un favor a su mejor amigo para cuando se haya marchado. “Lo que sea”, responde su amigo.
“No le permitas a mi mujer vender mis bicicletas por lo que le dije que costaron”, le suplica.
“No le permitas a mi mujer vender mis bicicletas por lo que le dije que costaron”, le suplica.
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