Amanece el día de hoy con cielo gris, aunque menos frío que anteriores jornadas. Justo cuando emprendemos la marcha, la amenaza de lluvia se convierte en una realidad y cae un persistente sirimiri que nos acompaña un ratito, aunque el resto del día permanece sin precipitaciones.
Tomamos la Nacional I y vamos recogiendo a los que se incorporan por el camino hasta juntar un pelotón de 25 txalupas (otros dos se habían dado la vuelta nada mas salir, así que con el tiempecito de hoy, juntarnos casi treinta en la ruta, no está nada mal. Ya hay quien hace apuestas de cuantos saldremos cuando empiece el buen tiempo primaveral: ¿llegaremos a formar un pelotón de unos 50? Recordad que el record está en 43)
Fotos tomadas por Pablo.
Pinchazo de Isaac en el tramo de bidegorri entre Errenteria y Oiartzun. Una vez subsanada la avería, el grupo se compacta en el barrio oiartzuarra de Iturrioz, a la altura del afamado restaurante Zuberoa, cuyo jefe de cocina es Hilario Arbelaiz. Figura en la guía Michelin con una estrella, aunque llegó a tener dos.Y a partir de aquí comienzan las cuestas. Recorremos un rato el camino de Santiago y luego seguimos pedaleando junto al curso de la erreka Sarobe hasta el caserío del mismo nombre. Desde ahí, por un precioso camino que pasa junto al caserío del muchachote de las plantas de bricomanía (caserío que en la hoja de ruta es llamado del pavo que pika), nos llegamos hasta el antiguo merendero Sorondo.
Ya nos hemos quedado solos los del equipo Z, pues los rapidillos del A se han dirigido hacia Bianditz para coger luego una bajada nueva hacia la carretera de Aritxulegi. ¿Qué tal os ha ido?
Fotos tomadas por Ignacio Mazpule.
Nosotros hemos optado por una ruta mas corta, que nos ha llevado hasta Malmazar. Solo por este tramo, del caserío Sarobe a las inmediaciones de Urdaburu, ya merece la pena hacer esta vuelta. El alto nivel de precipitaciones y la poca presión humana sobre el espacio, genera la existencia de unos magníficos ejemplos de bosques de hayas y robles: ¡una auténtica gozada de paseo!.
Seguimos el recorrido y bajamos pasando primero por la benta Idoia,en Susperregi, luego por el restaurante Mugaritz (dos estrellas en la guía Michelin 2009), para parar un rato en la gasolinera cercana a la benta Perurena y lavar las bicis. De aquí hasta Amara sólo queda un suspiro, que lo hacemos a paso tranquilo y de charleta, ya que es temprano y no hay prisa. Llego a casa a las doce y cuarto y me preparo para salir a tomar el aperitivo dominguero.
Como con 14º grados de temperatura se puede estar en las mesas de fuera, tomamos el primer pintxo (rabo de toro) en Zubieta, concretamente en el Barazar, que es también casa rural. Y el segundo (viendo el final del partido del Bruesa, que ganó de un punto) en el llamado Estanco o mas concretamente Restaurante Alamandegui (carne cocida). Y a la tarde, a Anoeta, a ver el triunfo de la Real..., ¡por fin!
No hay comentarios:
Publicar un comentario