Crónicas, fotos y vídeo del domingo 26 de Abril

A las 8:38 de la mañana, nos ponemos en marcha los 22 txalupas del equipo Z que nos hemos decidido a salir, a pesar del sirimiri que caía a esa hora. El equipo A sigue otra ruta, y los del Z, nos vamos hacia Loiola, donde se nos une Alberto.

Llegamos a Astigarraga y se decide subir a Santiagomendi por la carretera que pasa junto al polideportivo, sin duda la ruta más dura de las muchas que hay para llegar a la ermita. Pero como somos un poco masocas... 

Son "sólo" dos kilómetros y medio. El primer kilómetro es el más duro con rampas de hasta un 21% mientras vamos trazando una herradura tras otra sobre el asfalto que se nos agarra a la rueda como queriendo impedir su avance. 

Son 600 m interminables con una media superior al 14% que no nos dejan respirar en condiciones hasta que no entramos en el barrio de Sandio: aprovechamos bien esos doscientos metros para recuperar el aliento. Las rampas vuelven a acercarse peligrosamente al fatídico 20%, pero en esta segunda mitad de la escalada se alternan con algún ligero descanso (lo que no quiere decir que sea llano) para no asfixiarnos del todo. Pero, ¡ojo!, que la rampa final que da acceso a la ermita alcanza el 22% y justo nos permite soltar el pie de la cala al entrar en la explanada del alto a casi 300 m de altitud.

En la cima, disfrutamos del impresionante paisaje de valles y montañas que se contempla en derredor. Los pricipales montes de Euskadi están a la vista: el Sollube, Oiz, Aizkorri, Ernio y las Peñas de Aia, entre otros muchos que aparecen reseñados en un cartel explicativo muy a propósito.

Bajamos a Mugaritz y seguimos un poco hacia Listorreta hasta que giramos a la derecha y nos metemos en una antigua urbanización, curiosa, misteriosa, fantasmagórica... Fuentes antiguas, asfalto comido por la vegetación (exuberantes plantas, que se han comido el ancho del camino dejando sólo un senderito estrecho). Con un embalse plagadito de ranas.

Merece la pena ir, si bien ponen alguna traba remarcando la propiedad privada de donde transitamos. Nuestro camino en su tramo final discurre junto a la erreka Epele, que nos deja frente al polígono del mismo nombre, donde está Orona. Paramos en Karabel a lavar las bicis y a casa, a donde llego a las doce, con tiempo más que suficiente (la etapa de hoy ha salido un poco corta) para ducharme y salir a tomar un aperitivo con mi pareja.

La crónica del equipo A, por Sebas

Muchas dudas en el "A" a la hora de decidir la ruta. Se piensan todas las direcciones y al final cima Andatza. Nos dirigimos a la cuesta de las ranas, (donde se nos agrega un txirrindulari, que ya sabe cosas del Txalupa) y somos 15.Por cambiar, hacemos la subida por S. Esteban, creo que a todos nos toca empujar el tramo del caserio en obras perpetuas. Llegamos a la pista que bordea el monte, cogemos a la dcha. para luego coger el desvio de la izda. que nos lleva a mitad del cortafuegos. Aquí Rikardo que tiene prisa se dá la vuelta y el resto a por la cima. Cerca de la cima nos encontramos una fuente nueva (habrá que tenerla en cuenta) aquí pikoteo y se decide la bajada por caminitos, mas abajo toca investigar variantes, siete por el ¿sitio bueno? y los otros siete por la incognita, quedamos en Zubieta donde nos juntamos y de aquí a casa con un bici/pote en Amara. 45km. y a las 14h.