La mañana ha salido fresquita pero con un cielo en el que apenas se apreciaban unas pocas nubes. Así que que con unos 16º C de temperatura hemos emprendido la marcha los once (luego tendríamos otra incorporación para hacer un pelotón de doce) que no hemos ido ni a Uzturre ni a Formigal.
Como marcaba la ruta para hoy para los que que no querían hacer una especial, nos hemos encaminado hacia Pasaia, Errentería y Lezo atravesando en primer lugar el túnel de Txaparrene. Hemos empezado la subida a Jaizkibel por carretera hasta alcanzar el cruce con el cortafuegos. Tres del grupo han decidido seguir por el asfalto y los otros nueve hemos rodado por la pista de arena y piedra hasta llegar a Guadalupe.
El reagrupamiento ha sido general, pues también nos hemos juntado con los que venían por la carretera. Tras un breve descanso, nueva separación: los mismos tres de antes bajan hacia Hondarribia con intención de volver por carretera a Donosti y el resto tomamos la pista de arriba para llegarnos hasta el cruce de los dos cortafuegos.
Nos reagrupamos a bajamos hacia la gasolinera con intención de lavar las bicis y quitarles esa abrasiva arena que hemos acumulado en la mañana de hoy. Pero el lavadero estaba ocupado y no hemos querido esperar y hemos seguido hasta casa.
Esta ruta de hoy tiene su encanto especial (aunque no para todos), recorre uno de nuestros montes cercanos desde donde se aprecian unas maravillosas vistas, tanto de los montes próximos a Donostia, como de Irun, Hondarribia y Hendaye. Con buen tiempo como el que ha hecho hoy, se ve perfectamente Larun y sus antenas. Y casi diría yo que se ve Biarrtiz en el horizonte.
El reagrupamiento ha sido general, pues también nos hemos juntado con los que venían por la carretera. Tras un breve descanso, nueva separación: los mismos tres de antes bajan hacia Hondarribia con intención de volver por carretera a Donosti y el resto tomamos la pista de arriba para llegarnos hasta el cruce de los dos cortafuegos.
Nos reagrupamos a bajamos hacia la gasolinera con intención de lavar las bicis y quitarles esa abrasiva arena que hemos acumulado en la mañana de hoy. Pero el lavadero estaba ocupado y no hemos querido esperar y hemos seguido hasta casa.
Esta ruta de hoy tiene su encanto especial (aunque no para todos), recorre uno de nuestros montes cercanos desde donde se aprecian unas maravillosas vistas, tanto de los montes próximos a Donostia, como de Irun, Hondarribia y Hendaye. Con buen tiempo como el que ha hecho hoy, se ve perfectamente Larun y sus antenas. Y casi diría yo que se ve Biarrtiz en el horizonte.
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