Crónica de la etapa del domingo, 4 de Enero

¡Casi, casi batimos el record de Txalupas en el punto de salida: nos dimos cita cuarenta compañeros! (el record está en 43, que nos juntamos una soleada mañana del pasado 17 de Febrero)
Con 7-8º C de temperatura nos dirigimos a Andoain, pasando por Egia, Loyola, Martutene, Ergobia y Hernani. Notamos en la parada obligatoria que hacemos en Ergobia que faltaba gente. Y era que Victor había roto el cable que cambia los platos. Ya estaba pensando en regresar a casa, cuando, como por arte de magia, apareció alguien que tenía un cable de repuesto. Se reparó la avería y continuamos.
Al llegar al colegio Lasalle en Andoain, el grupo se partió mas o menos en dos: el equipo A siguió la ruta marcada para hoy (es decir, seguir hasta Villabona, Aduna, Monte Belkoain, Andatza, Usurbil y a casa), y el equipo Z optó por acortar la etapa.
Nuestro camino nos llevaría a Lasarte después de recorrer las laderas del monte Buruntza.

Nos detuvimos a contemplar el yacimiento donde se hallaba la primitiva parroquia de Andoain que se encontraba al pie del monte Buruntza, en una ubicación apartada del centro del pueblo.
Después, fuertes pendientes, empujain byke, vallas cerradas que había que pasar por arriba, un par de caídas, una cadena rota y preciosos paisajes.
Pero por fin llegamos a Lasarte y, como en la gasolinera había cola para lavar las bicis, pues carretera y a casa. Pero Jose Mari, uno que es bombero de Irún que ya ha venido un par de veces, y yo, lavamos las bicis en Rekalde, que así las tenemos limpias para la salida del día de Reyes.
Llegué a casa a las 12:22 con los mismos grados de temperatura que hacían en la salida. Ducha y a Igara a tomar el apertivo. Tomamos un pintxo de chorizo cocido a la sidra y otro de vieira rellena con bechamel. Y sidra, como no!